sábado, 9 de julio de 2016

Episodio 32 - Niños que cantan


Ha llegado el momento de hablar de los niños y las niñas. ¿Es que ya nadie piensa en los niños? Ellos/as también cantan, también tocan instrumentos, también participan de la mezquina industria musical, de los programas de karaoke-exploitation para televisión, de los escándalos mediáticos y de la perpetua imposición de la cultura oficial. La relación de los infantes con todo esto es enorme, por supuesto. Muchísimos artistas clásicos de todos los tiempos fueron niños/as prodigio/a. Muchos padres aficionados a la música y/o músicos frustrados, animaron y teledirigieron a sus retoñ@s para que grabaran discos. Todas las escuelas del mundo organizan festivales de fin de curso. E incluso hubo proyectos verdaderamente interesantes musicalmente, al margen de que sus responsables aún no supieran leer.


 El tema es amplísimo. Las superestrellas infantiles de la música han estado ahí siempre, antes incluso de Wolfgang Amadeus Mozart. Buena parte de los pequeños artistas nos resultan un poco repelentes; y al estar en gran medida carentes de referentes musicales interesantes, casi siempre nos vamos a encontrar con personitas en miniatura rindiendo culto a artistas del pop comercial más obtuso; así, lo que resulta realmente difícil es encontrar artistas o conjuntos de menores de edad que hagan algo original, que no se limite a versionar al casiotone a sus ídolos descerebrados.


Pero lo hay. Vaya si lo hay. Existen bandas integradas por niños y niñas de 5 años que hacen heavy metal; las hay que componen piezas de bluegrass, hay fenómenos de indie kids enrabietados que se desgañitan haciendo shoegaze lo-fi inspirados en monstruitos del armario o en hamburguesas; y por supuesto muchos y muy variados conjuntos en los que adultos y menores se entremezclan para dar salida a todo tipo de composiciones interesantes.


Esto será una introducción apresurada a todo esto. Y escucharemos algunos discos perpetrados por menores (generalmente, con adultos al otro lado de la pecera guiando la batuta) que brillan con luz propia. Pequeñas obras maestras de la música outsider que ocupan un espacio en el corazón de los/as adultos/as aficionados a la música con alma.



Esta tarde a la siesta, por radioELA.org.


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