Si
el anterior número de esta decana cabecera me pareció una joya, repleta de descubrimientos y artículos verdaderamente exóticos y brillantes (como dice una de las cartas a Pitusa, acordándose de la escena de
"Arrebato" con los cromos del safari), este reciente nº 43 me ha decepcionado un poco. En primer lugar, porque nunca me ha gustado mucho Fu-Manchú, me da bastante igual el personaje (prefiero a los malos de Shang-Chi o a Gao Ping), y casi todas las páginas se centran en su vida y milagros. El artículo de Jesús Palacios es como siempre resolutivo, y lo mejor las recomendaciones literarias de antecedentes del de Rohmer, que se reomontan a finales del XIX, qué tío más culto. El resto de artículos ahondan en lo mismo (bueno, al Abuelito siempre es un placer leerle, y la recopilación de tebeos españoles vs. chinos hioputas mola), y vale, en diez minutos los despaché. Como siempre, un diez al diseño. Pero es que esta vez, los artículos se acaban en un pispás, y todo el resto del fanzine, más de las dos terceras partes, son reseñas de películas. Y como a priori no me vuelve loco el asunto, pues no sé... Eso sí, para el aficionado al
mad doctol, es imprescindible, y tan divertido y hermoso como siempre. Y el comité de sabios no deja de crecer, qué gusto. Habrá que esperar al próximo Festival de Donosti a ver si me devuelve la ilusión. O a lo mejor organizo yo un festival en mi casa este verano para subvencionar un nuevo Mañacos.
Fu Manchú mola, hombre, Antichinox. Y hay que decir que un número donde uno descubre una peli titulada Cole cole que te como no es un número echado a perder...
ResponderEliminarEl personaje mola, pero las películas que he visto son muy intensas, y me leí una de Sax Rohmer y me aburrió un poco. ¡Y "Cole cole que te como" es un clásico"! Yo la vi de pequeño
ResponderEliminar