Ahora mismo, en la maravillosa emisora WFMU, en el show nocturno de John Allen (miércoles a mediodía en España), está terminando de sonar entero
"Getting away with murder", un disco que pillé hace mucho tras escucharlo, igualmente entero, en algún otro recóndito programa de la misma emisora libre sindicada. Se trata de la grabación en crudo, de una menos cuarto a una y media, una mañana cualquiera de febrero de 1995. Dos desconocidos músicos callejeros, captados en directo en el
subway de Nueva York. Una improvisación de 45 minutos de jazz en estado puro. Saxo y percusión desatadas. De fondo, de cuando en cuando suena un tren llegando a Grand Central Station, las aclamaciones del público o una voz neutra anunciando algo por la megafonía. Tom y Sabir despliegan una lección del mejor free-jazz posible, absolutamente arrebatador y energético. En las antípodas de la Industria, del tejemaneje discográfico, es una filigrana imprescindible y una muestra maravillosa de lo que la música debería ser siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario